viernes, 21 de junio de 2013

The Girl of Fire and Thorns,Rae Carson



Una vez cada siglo una persona es elegida para la grandeza.

 Elisa es la elegida. Pero también es la más joven de dos princesas, la única que nunca ha hecho nada notable. No puede ver como lo hará.

 Ahora en su decimosexto cumpleaños, se ha convertido en la esposa secreta del apuesto y mundano rey un rey cuyo país está en crisis.

 Un rey que necesita a la elegida, no a un fracaso de princesa.

Y él no es el único que la necesita. Salvajes enemigos que practican magia oscura están cazándola. 


Un audaz revolucionario esta determinado en que ella podría ser la salvadora de su pueblo. 

Y él la mira de una manera en la que ningún hombre la ha mirado antes.

 Pronto no solo su vida, su corazón también estará en juego.

Elisa podría ser todo aquello que más necesitan. Si la profecía se cumple. 



Si encuentra supoder escondido dentro de ella. Si ella no muere joven.


La mayoría de los elegidos lo hacen

lunes, 17 de junio de 2013

Voices of Dragons-Carrie Vaughn



A un lado de la frontera se encuentra el mundo moderno: Internet, bailes de promoción, los teléfonos celulares. 

En el otro lado viven los monstruos antiguos que provocan los temores más profundos de la humanidad: los dragones.

De diecisiete años de edad, Kay Wyatt sabe que está infringiendo la ley al escalar la roca cerca de la frontera, pero ella prefiere tener una aventura que seguir las reglas. 



Cuando el dragón Artegal inesperadamente le salva la vida, una amistad secreta crece entre ellos, a pesar de que la frágil tregua que ha mantenido la paz entre las especies de los dos se está deshaciendo a su alrededor. 

Mientras las tensiones aumentan y las batallas comienzan, Kay y Artegal quedan atrapados en el medio.

 ¿Acaso su amistad puede cambiar el curso de una guerra?

Algunas chicas muerden 1, Chloe Neill


Me mataron. Me curaron. Me cambiaron.



De seguro la vida de una estudiante recién graduada no es exactamente lo que se dice glamorosa, pero era mía.


 Lo estaba haciendo bien hasta que los vampiros de chicago anunciaron su existencia al mundo, después un vampiro salvaje me atacó. 


Pero solo tomo un sorbo antes de que otro chupasangre lo asustara y éste decidió que la mejor manera de salvar mi vida era convirtiéndome en una no-muerta.


Resulta que mi salvador era un Maestro-Vampiro de la Casa Cadogan.


Ahora debo aprender a encajar en una mansión en Hyde Park llena de vampiros leales a Ethan “señor DE LA casa” Sullivan. 


Por supuesto, como es alto, de ojos verdes, de cuatrocientos años de edad, posee un encanto de siglos, que desafortunadamente espera mi gratitud y mi sometimiento. Claro...


Pero mis crecientes poderes (repentinamente, soy muy hábil con algunas armas algo serias), una inconveniente alergia a la luz solar y la actitud de Ethan, son las ultimas de mis preocupaciones.


 Alguien todavía quiere atraparme. ¡Será el vampiro salvaje que me ataco?, ¿un vampiro de la casa rival?, ¿una enojadísima turba de gente sosteniendo antorchas?


Mi iniciación en la vida nocturna de chicago puede ser la primera batalla en una guerra, y allí habrá sangre…

Undeniable,Madeline Sheehan




La historia de Deuce y Eva

Una innegable conexión que supera la prueba del tiempo.

Momentos inolvidables.

Amor y dolor, todo en medio.



Tenía cinco años cuando conocí a Deuce, él tenía veintitrés, y era el día de visita en la Isla Riker. 


Mi padre, Damon Fox o “Predicador”, el presidente del infame club de motocicletas “Demonios Plateados” en East Village, Nueva York, cumplía una sentencia de cinco años por asalto agravado y agresión con arma.


 No era la primera vez que mi padre iba prisión y no sería la última.


 El Club de Motocicletas “Demonios Plateados” era un notorio grupo de criminales que vivían bajo el código de la calle y daban a la sociedad moderna y a todo lo que implicaba, un muy grande “jódete”.

«Nunca olvidaré el día en que Eva llegó saltando a mi jodida vida, sacudiendo sus coletas, cantando a Janis, usando convers y compartiendo cacahuetes. Me robó directamente la decencia me quedaba, la cual no era mucha, pero la tomó y he sido de ella desde entonces»